* Facultad de Enfermería celebra 61 años de creación con reflexión sobre vocación y futuro.
En un país donde la salud pública enfrenta tensiones y desigualdades, la figura de la enfermera emerge como un pilar silencioso y decisivo. Su labor combina ciencia, cuidado y liderazgo, recordando que cada decisión tomada en el día a día puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
La Dra. Mayrene Abarca, decana de la Facultad de Enfermería de la UNSA, hizo esta reflexión durante la ceremonia por el 61.º aniversario de su creación. La decana remarcó que la esencia de la profesión no radica solo en la técnica, sino en la capacidad de humanizar la ciencia y sostener un compromiso ético permanente.
Se destacó la responsabilidad de las nuevas promociones: enfermeras capaces de enfrentar los desafíos de la salud con sensibilidad y conocimiento. “Humanizar la atención” fue la idea central de un discurso que buscó interpelar tanto a estudiantes como a la sociedad.
Actualmente, la facultad cuenta con 418 futuras profesionales, está acreditada a nivel nacional por el SINEACE e internacionalmente por los CIIES de México. Tiene en marcha proyectos de modernización de su infraestructura para mejorar la calidad de la enseñanza. Además, registra un 97,67 % de egresadas de pregrado que logran graduarse y titularse.
El rector de la casa agustina, Dr. Hugo Rojas Flores, también destacó la exigencia de la carrera: “Hay que tener una mística enorme, un rigor terrible y una voluntad férrea. Mientras otras profesiones gozan de libertades, en esta se sirve en todo momento”, expresó.
Recordó, además, los inicios de la facultad y el impacto que tuvo más allá de Arequipa. “Fueron las primeras embajadoras en el mundo. Hoy hay enfermeras en todo el Perú y en lugares donde no llega nadie, pero ellas están allí”.
El acto cerró con un mensaje que trasciende lo protocolar: la enfermería es presente y futuro de la salud pública. La UNSA reafirmó su misión de formar profesionales que combinen técnica y vocación, en un país que requiere, más que nunca, cuidar con dignidad a sus ciudadanos.


