UNSA refuerza la inclusión universitaria con la formación en lengua de señas

La construcción de una universidad accesible exige herramientas que permitan comunicarse con toda la diversidad de estudiantes. Bajo esta premisa, la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa (UNSA) culminó el II Taller de Lengua de Señas Peruana (LSP), una iniciativa orientada a fortalecer la inclusión y mejorar la interacción con personas con discapacidad dentro de la comunidad agustina.

El taller, organizado por la Defensoría Universitaria, desarrolló sesiones formativas los días 1, 2 y 3 de diciembre en los auditorios de la Facultad de Ciencias Histórico Sociales. La actividad logró una amplia convocatoria con 382 inscritos, con una asistencia sostenida durante los días, reflejando el interés por adquirir competencias en comunicación inclusiva.

Las sesiones estuvieron conducidas por cuatro ponentes sordos, acompañados por tres intérpretes, quienes facilitaron el desarrollo de los módulos y el aprendizaje directo en un entorno inmersivo. El equipo docente estuvo conformado por Jheover Wilgem Rojas Inga, Alexandra Valery López Rojas y Gyan Carlos Yauri Pomasconcco, quienes guiaron los contenidos del taller.

La capacitación incluyó temas como el alfabeto manual peruano, números, relaciones personales y familiares, cuerpo humano y primeros auxilios, así como prendas de vestir, accesorios y cultura sorda, con el fin de establecer bases prácticas para mejorar la interacción cotidiana entre estudiantes, docentes y personal administrativo.
Durante la clausura, la Dra. Luz Marina Gamarra del Castillo, Defensora Universitaria, destacó que la UNSA avanza en la consolidación de políticas universitarias inclusivas, señalando que

la formación en lengua de señas constituye una herramienta indispensable para eliminar barreras comunicativas y garantizar una participación equitativa de estudiantes con discapacidad auditiva.

La Defensoría Universitaria precisó que este esfuerzo forma parte de un programa permanente orientado a sensibilizar a la comunidad agustina y promover un campus donde todas las personas, sin distinción, puedan desarrollarse plenamente.