Inician su internado en hospitales y centros de salud de la región.En una emotiva ceremonia, los estudiantes de la Facultad de Enfermería de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa (UNSA) recibieron el uniforme turquesa como símbolo del inicio de su internado en diferentes hospitales y centros de salud de la región, acto que también representa el cierre de un ciclo académico y el inicio de una nueva etapa llena de desafíos, pero también de grandes responsabilidades.
La ceremonia fue presidio por la decana, Dra. Jacinta Mayrene Abarca del Carpio, en la que 77 estudiantes de la promoción Cure Della Vita 2021-2025 recibieron además el pin institucional de la UNSA y la insignia de la lámpara de enfermería de Florence Nightingale, símbolos de su compromiso con la profesión en donde pondrán a prueba lo aprendido durante su formación.
La decana también resaltó el privilegio de estudiar en una universidad con prestigio y de formar parte de una facultad que, aunque joven con 60 años de historia, ha avanzado rápidamente y ha obtenido acreditación internacional. «Ustedes son un grupo selecto, un grupo privilegiado, que ha logrado ingresar a esta universidad y estudiar en esta facultad que les garantiza una educación de calidad».
Asimismo, la Dra. Jacinta Mayrene Abarca instó a los estudiantes a no conformarse con solo obtener un empleo, sino a ejercer liderazgo en las diferentes áreas de la salud. «La universidad espera que ustedes sean líderes en la asistencia, en la investigación, en la docencia y en la gestión. Ustedes tienen la responsabilidad de contribuir a transformar la sociedad y mejorar la salud pública», añadió.
Por su parte, la estudiante Alessandra Pacheco Aguilar, en representación de la promoción, agradeció a las autoridades, docentes y familiares por el apoyo brindado a lo largo de su formación.

El internado de los futuros enfermeros comenzará en los campos clínicos del Ministerio de Salud, en hospitales como el Honorio Delgado y Goyeneche, así como en varios centros de salud de la región, gracias a un convenio respaldado por la universidad. Esta es una etapa exigente, pero también representa una oportunidad única para consolidar los conocimientos adquiridos durante su formación.
La ceremonia comenzó con una significativa misa de bendición de los uniformes, oficiada por un representante de la iglesia, en la que se pidió por la protección y el éxito de los estudiantes, quienes pronto se incorporarán al ejercicio de su profesión en el ámbito de la salud. La liturgia, cargada de simbología y esperanza, ofreció un espacio de reflexión tanto para los estudiantes como para los docentes y familiares presentes, quienes acompañaron este momento trascendental.