La comunidad de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa (UNSA) reafirmó su compromiso con la solidaridad y el bienestar social al participar activamente en la Segunda Donatón de Sangre, recolectando 187 unidades de 450 mililitros de este vital recurso, un valioso aporte para salvar vidas.
La actividad, organizada por la Unidad de Responsabilidad Social de la UNSA, se llevó a cabo bajo el lema “Súmate y juntos salvemos vidas”, con la participación de estudiantes, docentes y personal administrativo de la universidad, quienes se unieron a esta cruzada para apoyar la causa, desde las 8:00 hasta las 12:00 horas.
Los puntos de recolección se ubicaron en el comedor universitario, en el área de Sociales; en el auditorio de Ingeniería Ambiental, en el área de Ingenierías; y en la Facultad de Medicina, en Biomédicas, donde los bancos de sangre del Hospital Regional Honorio Delgado, el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (IREN Sur) y el Hospital Carlos Alberto Seguín Escobedo del Seguro Social de Salud (EsSalud) se encargaron de recibir y procesar las donaciones.
Más de 60 profesionales de la salud, incluyendo médicos, enfermeras y personal especializado, se encargaron de asistir a los donantes, quienes pasaron por un riguroso protocolo para garantizar que cada persona fuera apta para la extracción.
La Dra. Marisol Ballón, coordinadora del Banco de Sangre del Hospital Regional Honorio Delgado, agradeció la participación de la comunidad agustina mostrando su empatía y precisó que cada unidad recolectada tiene el potencial de salvar hasta tres vidas, lo que destaca la trascendencia de este tipo de actividades.
La campaña también contó con la colaboración de otras instituciones, como el Hospital de la Policía, diversas clínicas particulares y la Cruz Roja Peruana, lo que permitió ampliar el impacto de la jornada y fortalecer el compromiso con la salud pública y el bienestar de la comunidad.
Con este éxito, la UNSA reafirma su compromiso con la responsabilidad social, promoviendo acciones que no solo contribuyen a salvar vidas, sino que también fomentan un sentido de solidaridad y cooperación entre sus miembros.