La acreditación institucional se ha convertido en una de las principales exigencias para las universidades peruanas en un escenario académico cada vez más competitivo. En ese marco, la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa (UNSA) se encuentra en la recta final de su preparación para la visita de un equipo de evaluadores externos que revisará su gestión académica y administrativa entre el 27 y el 31 de octubre.
Por ello se brindo dos sesiones de capacitación a los decanos, directores de escuela y otros jefes de dependencias universitarias comprometidos con el proceso. La capacitación estuvo a cargo de la Oficina de Gestión de la Calidad.
El proceso no solo involucra a las sedes principales en Arequipa, sino también a las filiales de Mollendo y Camaná. Según el Jefe de la Oficina de Gestión de la Calidad, Dr. Oscar Núñez Tejada, el trabajo se centra en asegurar que todos los niveles de la institución estén alineados con los estándares de calidad. “La acreditación no es responsabilidad de una oficina, sino de toda la comunidad universitaria. Hemos empezado con los decanos porque son líderes en sus facultades y tendrán un papel decisivo en este proceso”, señaló.
La comisión que llegará a Arequipa estará integrada por cuatro especialistas de distintos países: España, Colombia, Chile y Perú. Su labor no se limitará a constatar evidencias, sino que también ofrecerán retroalimentación que permitirá identificar áreas de mejora. “Posiblemente recibamos muchas sugerencias y consejos que serán de gran valor para seguir creciendo”, agregó Núñez.
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Este tipo de procesos responde a la necesidad de medir la calidad educativa bajo criterios internacionales. En la práctica, significa evaluar desde la pertinencia de los programas académicos hasta la infraestructura, los servicios de apoyo y la gestión institucional. En universidades de la región, la acreditación ha marcado diferencias en la atracción de estudiantes, la empleabilidad de los egresados y la generación de convenios internacionales.
Al cierre de la visita, los evaluadores presentarán un informe preliminar. Sin embargo, el dictamen final demorará alrededor de 30 días, pues requiere la verificación documental y técnica de todas las evidencias. “Para diciembre ya deberíamos conocer si estamos acreditados, por cuánto tiempo y bajo qué condiciones”, adelantó Núñez.
Más allá de los resultados, este proceso se configura como una oportunidad para la UNSA de posicionarse en el mapa de universidades que buscan consolidar su calidad académica y su proyección internacional en un entorno donde la acreditación se vuelve sinónimo de confianza y competitividad.